La ocupación de la Nada avanza a una velocidad de vértigo, mucho más de lo que Michael Ende imaginó. Las redes sociales y sus aplicaciones nos invaden sin otro remedio que un colapso mundial o un conflicto bélico de envergaduras planetarias. Que los Dioses no lo quieran, o sí. Generaciones se quedan colgadas en Nadas […]