Sincronías de la vida, o todo aquello que has pedido a voces de silencio durante un tiempo ilimitado, se presentan de repente diciéndote «Hey, malandrín, que estamos aquí todos juntos de sopetón, tu tiempo ha llegado». Pues me he levantado con un «mañana ya esta aquí» sin darme cuenta de que el mañana es hoy. […]